lunes, 23 de diciembre de 2013

Soñar

Le escuchaba atentamente como si los pájaros no hubieran volado todavía y el humo del cigarro se metiera por la nariz tratando de llegar a los pulmones.
Pensaba en lo caprichoso que es el destino a veces y en frenar las letras de las canciones antes de que toquen corazón abierto.
A lo mejor, esto es fruto de una casualidad y es mejor poner los pies en tierra cuanto antes. Pero claro, luego sonaba Extremoduro y volar se vuelve mucho más fácil.
Todo el vértigo que le tengo yo a la literatura ella se lo tiene a quererme, porque quererme es cruzar un océano sin saber en que punto está el próximo toque a tierra. Y no es a la primera que le pasa, pero si la primera que está dispuesta a hacerlo.
Ella todavía no sabe que ha curado algo que no está en la piel, que ni si quiera está en el alma pero que duele al respirar tanto como un día sin música, o como un día sin ella. Que es lo mismo.
He entendido que no hace falta llevar sombrero para tener la cabeza repleta de sueños. Aunque soñar...ya sabes, no lo recomienda ningún medico con los pies en el suelo.

viernes, 13 de diciembre de 2013

Debajo de tu nombre,
donde todos los días
huele a azahar y sale el sol
donde los viernes por la mañana
hay guerras frías y por la noche
un millón de razones para no perderte


Debajo de tu nombre,
donde Lorca escribió Poeta en Nueva York
donde Picasso puso color a tu llanto
donde mis manos aprendieron
a tocarte en braille


Debajo de tu nombre,
también duermen mis veranos
de paseos en bicicleta y besos llenos de libertad
donde se cuela una melodía de piano
y hay un baile de fin de curso
en cada bar que nos cierran


Debajo de tu nombre,
hay un París de calendario
mis venas goteando versos, incluso un cigarro apagado
con marcas de yo te quiero


Debajo de tu nombre,
la Alcazaba nos concede cinco minutos más
y el Guadiana tatúa en tu piel otra despedida amarga


Debajo de tu nombre,
cuelga mi nombre en susurro
y hay una bandera rota
clavada en tu lagrimal


Debajo de tu nombre, amor,
me he lanzado al vacío

buscando las llaves del mundo

lunes, 11 de noviembre de 2013

Que me perdonen las fans

No eres igual que cualquiera aunque a veces el miedo te coja de imprevisto y se meta debajo del edredón y las dudas te suban por la entrepierna y entorpezcan tu forma de hablar, pero yo las dudas, como dice Escandar, me las follo. No eres igual que cualquiera y lo sé desde la primera vez que vi tus ojos enfocados en mi historia, en mi vida. Desde la primera vez que dejaste trocitos de estrellas en mis manos y música en los desayunos de café y besos.

Haces que cualquier invierno tenga luz, ese tipo de luz que nos despierta por la mañana y nos araña los ojos, ese tipo de luz que ilumina los libros de poesía que hay en mi mesilla de noche.

He pensado en la paz de estar solo y prefiero cualquier guerra contigo, aunque las tenga perdidas ya de antemano.

El otro día pasé por la calle donde empezó casi todo y fui feliz. No del todo porque eso es imposible si tu no estas pero fue una sensación muy parecida a cuando descubrimos aquella terraza en el puente de Triana con la Giralda de fondo o a la primera vez que decidimos que esto tenía que ser de verdad.

A veces tengo la sensación que hay algo más y que no consigo ponerle nombre, que me faltan palabras para tanta metáfora y ni siquiera Joaquín, el Robe o Leiva pueden llegar a decirlo en sus canciones y aunque me jode luego lo pienso y se saltan las alarmas de mi sonrisa.

Dicen que cuando tocas fondo es cuando vienen las musas pero a mi contigo me ha pasado al contrario y ahora tengo más motivos que nunca para escribir-te. Para lanzar al aire mis versos y que se cuelen en otras habitaciones y se conviertan en parte de alguien para siempre.

Eres algo más que una chica de una ciudad pequeña, inteligente y precisa cuando hay que serlo, soñadora y tenaz cuando te acaricio lento.

Hoy me ha dado por ahí, por escribir un poco de ti que ayer te noté un poco baja y no me gusta verte triste. Estabas preciosa cuando hablamos por Skype, creo que te lo dije. Si no, aquí queda.
No queda nada , y queda todo (por hacer).

Se me están empezando a cerrar los ojos, voy a echarle una ojeada al blog que nolegustasunombre y me voy a dormir.

El viernes te veo, que no se te olvide meter en la maleta los besos y las sonrisas, sobre todo las sonrisas.


Te quiero...


que me perdonen las fans.

martes, 5 de noviembre de 2013

nunca una canción

nunca has escuchado una puta canción de verdad
y se te atraganta el pasado cuando miras y arrojas la toalla
la vida es una escalera de caracol, decías,
tú que siempre pensaste en las estrellas cada vez que una hostia te estampaba contra el cielo

en las estrechas calles del barrio, mientras tu novio te saca del mundo con un beso sucio
y cuentas la pasta para el siguiente litro, el vicio se convierte en virtud
y una pequeña sonrisa sabes que nunca saldrá en un telediario

tu chico te dice que le faltan dos asignaturas para acabar la carrera y que no sabe si el futuro es mejor abrazarlo o dejar que te abrace
y tú le abrazas y le dices que es mejor no esperar porque el que espera nunca pinta de color los sueños

recuerdas tu primer amor y lo que has aprendido desde entonces cuando no esperabas más de nadie que liar un porro o que te llevaran en moto al instituto

te irás a dormir a las doce, después de cruzar el parque de aluche, cenar un kebab a pachas y decirle a tu madre que mañana no te despierte
te apurarás el libro de Murakami, que no te va pero que te recomendó el melenas ese de la universidad, pensarás en Cristina y en Ana, que hace mil que no quedas con ellas y te apetece echar unas cerves que hace tiempo que no te mojas los labios y eso siempre ha sido un recurso cuando las cosas no están en su sitio.

en vinilo suena mejor

vas en el metro
es lunes
suena
Lou Reed

Se acumulan las derrotas en los ojos
no sabes nada de Raúl desde hace tres días y el incendio llega ya
hasta las orillas de los pies

el revisor te pide el metrobus y lo has tirado sin querer al sacar el móvil
te dice que son 30 pavos de multa y tú le enseñas el escote y le regalas
diez años de vida. Good Play.

te bajas en Tribunal y el café del bar de siempre no sabe como siempre
el sol derrite las esperanzas y en la acera un vagabundo pide algo de suerte a la vida

tu jefe te dice que llegas tarde y piensas en el tiempo que te quedará en ese curro de mierda
pero al fin y al cabo curro
pasas las horas creando aviones de papel en tu imaginación
y la oficina es una cárcel de ordenadores y muebles

por fin da la hora de comer y por fin da señales Raúl, te manda un mensaje excusándose
y pretendiendo quedar contigo a la noche. Pues vale.

vuelves al barrio
es lunes
habrá bronca? perdonarás como siempre?
seguro que si

Lou Reed en vinilo suena mejor

un sueño se pierde, dos se registran en propiedad

hablabas en pasado cada vez que te daba por recordarle
y eso que estaba presente
pero para ti era algo irracional y no podías evitarlo

habías tenido los suficientes cojones de salir disparada
aquel mayo del año que ganamos el mundial
en la prórroga (como el gol de Iniesta)
viste como vuestro mundo se quedaba para siempre
en las miradas

y desde entonces
decidiste
hablar de él en pretérito
como si su cuerpo se hallara en el cementerio del pueblo

siempre fuiste así de radical incluso cuando te conocí
recitando a Benedetti en el ocaso
cuando te metías coca y follabas con cualquiera
que te ofreciera una copa

me decías que escribir es abrir un camino
y que lo de las musas son gilipolleces de poetas

y en mitad de unas cañas
yo te soltaba aquello de
más bajar cremalleras y menos alzar banderas

y claro,
acabábamos rociando con gasolina la ciudad

y ahora parece que sólo quedan cenizas

miércoles, 9 de octubre de 2013

Palabras para tu crisis



Me dices que hay calles oscuras que ahora te dan miedo

que la verdad se marchita sola y la mentira viene de frente

que lo de creer está sobrevalorado

y cuando te sientas a ver una peli parece que ya la has visto


Me cuentas que los días se solapan

y un reloj sabe más de ti que tú de sus horas

que en el supermercado la traición se vende muy barata

y los tequiero sólo están de oferta los 14 de febrero


Ilusión por soñar. Soñar para crear una ilusión. Eso me lo decías siempre

y siempre se descolgaba una escalera hacia el cielo.


Ahora parece que tu sonrisa está de Lunes, incluso cuando vengo a verte

y en tus manos hay razones para volar por los aires

y te entiendo,

pero también hay corazones que piden a gritos que no se arruguen tus veranos todavía

que no aprietes el botón de la no esperanza

que salgas afuera y te mojes

que siempre encontrarás París en mis ojos

cuando te muerda el frío y el otoño trepe como una enredadera


He venido a decirte

que la felicidad está en darle la espalda a las preguntas

se esconde en un poema

te abraza en una comida con amigos

o en el recuerdo de tu abuelo paseando por el parque


He venido a decirte

que estoy aquí, pegado a tu pena

lamiendo tus heridas

cosiendo sonrisas

aunque no me veas

todavía


jueves, 3 de octubre de 2013

Tu nombre al revés empieza por L

Cuando te vi girar aquella esquina
supe que todo era mentira
despegué de mis pensamientos las novelas
y los cuentos que me poseían

Saqué las banderas y las medallas
y desterré tu ropa interior
incluso la que nunca habías lavado

Me hice el loco en los bares y leí poemas
alternando amor y desacato

Monté una escuela de bailes
en la que nunca sonaba música
y vendí dos veces mi alma
a una agencia de viajes

Y un día,
después de un guión roto
dos mujeres mal folladas
y una muerte en el sillón

volví a verte

y no sentí nada


jueves, 19 de septiembre de 2013

Ahora

                                                             "... Ahora que tengo un alma no que tenía... "
                                                                                    (Joaquín Sabina)





Ahora que han cerrado las heridas
que el viento está soplando a mi favor
que salgo alegre en las fotografías
que tengo en el cajón cartas de amor


Ahora que no me faltan amigos
cuando hay escenas fuera del guión
y a la gente le emociona lo que escribo
y que sigo estando vivo cuando cambias de canción


Ahora que hay poetas que me llaman
y el miedo está aburrido en un rincón
ahora que me acuesto con las hadas
y que encima de mi cama siempre hay más de un corazón


Ahora que no hay fama ni dinero
que lo hago porque quiero y porque no hay nada mejor
ahora que si quieres lo dejamos

o nos vamos de la mano
de Madrid a Nueva York







lunes, 9 de septiembre de 2013

Pequeñas mentiras sin importancia

Me he cansado de andar descalzo
de pasear mi vida de puntillas y con una recortada apuntándome en la sien.
Y eso que a decir verdad me he buscado cada una de mis lágrimas y cada una de mis heridas y me has visto lamerlas, como perro viejo que soy, como también lamí las tuyas hasta curarlas. Me arrepiento de no valorar eso que tu llamas escribir pero que yo llamo soñar, eso que tu llamas contar historias pero que yo llamo meterlas en tu cama.

Últimamente el presente es más pasado que nunca, y me apedrean las miradas en el metro. Madrid es
un teatro donde siempre pierde el secundario y hay Sold Out en cada pase.

A veces te admiro por como digieres el ruido, el miedo, la sangre, porque yo no soy como tú y la guerra siempre me ha resultado un escenario demasiado duro.

Cojo el coche y joder que magia, allí sonando Lucinda Williams mientras el paisaje va cambiando de tono al igual que mi cabeza. En fin, estaba pensando en el último mail que recibí desde Venezuela, era una chica de unos veinte que me sacaba los colores y las letras a cucharadas, me arañó un poco el corazón, es así. Estas cosas no sé si te ayudan o todo lo contrario, supongo que más lo primero.

El caso es que paro en el bar ese que paro habitualmente que queda a medio camino de tu cama y la mía y apurando un café con leche con dos de azúcar no se porqué me vino esa frase de la canción;  ¿Dime que hay detrás de esas sonrisas tan tristes, un motor que no funciona o sólo corazones rotos ?, a veces me pasa, me llegan letras de canciones y se meten en huecos averiados de mis días. Dos con veinte me dice la camarera, y sigo mi ruta.

Paso el picadero ese que tanto me flipa, queda a la derecha antes de llegar a Talavera, pienso cuando pasé en abril o mayo, no recuerdo, y estaba tan verde aquello, con esos caballos tan anárquicos que desprenden esa belleza tan plástica. Hace tiempo que no monto a caballo me digo.

Me has mandado un mensaje por whatsapp, tengo el iPhone debajo del freno de mano, lo miro de reojo sin soltar el volante, como cuando viajo contigo. Me sacas una sonrisa.
Es curioso el cambio tan drástico al salir de la gran ciudad. Parece que respiras otra cosa. La puta monotonía joder. Pero como me gusta vivir en Madrid.
Qué diferentes son nuestras ciudades y que diferentes somos nosotros. Eso es lo bonito, encajar las piezas, mezclar los acentos, contagiarnos un poco.

Tu tierra, también mía, que de recuerdos me vienen a la mente cada vez que llego. El plato con embutido que siempre presidía las comidas, el arroz de mi abuela. El pueblo. Los veranos en aquel patio cerrado de casa. El paseo cuando el sol caía. Mis padres tomándose la caña en el bar de siempre. Nunca hice amigos allí pero guardo momentos en los bolsillos que me han hecho ser quien soy.  Una mezcla de nostalgia y alegría me invade por un momento, asique decido cambiar de canción.

Me estas esperando en la puerta de tu casa. Siempre me echas la bronca porque casi siempre llego tarde. Tenemos la típica riña que acaba en risas y besos. Vuelvo un poco a la vida, aterrizo.

Decidimos ir al sitio este de jarras a un euro. Nunca me acuerdo como se llama, ese que queda cerca de tu casa, donde el camarero siempre te acaba invitando a una ronda. Me siento algo cansado del viaje pero la cerveza me ayuda a entonarme, no está demasiado fría pero mi garganta lo agradece. Hablamos de esto y de lo otro, de mi poesía del viernes, de como te va en la universidad, de tu ex y de mi ex, de algún viaje que queda pendiente. Te echo algún piropo y me dices que soy un pelota. Risas. Más besos. Pero es verdad, joder estas preciosa. Como echaba de menos esto. Tú media sonrisa, tus ojos que me atraviesan, tu aro en la nariz. Tus 19. Puta Magia.

Pienso en los proyectos y en los sueños. Te lías un pitillo. Te miro. Me recuerdas a la chica esta...la actriz francesa, Marion Cotillard. Si esa que sale en la peli, joder como se llama, la tengo la punta de la lengua. Mierda no me sale. Te ríes. Me rio. Nos vamos.

Tienes el cumple de una amiga, no sabes si ir, me ves cansado. Te digo que vayamos un rato que le hará ilusión verte. Nos tomamos unas copas, nos liamos un poco. Me presentas a gente...ah este es el de Madrid, encantado, tal. Lo típico. Suena música algo estridente, me raya la verdad. Nos despedimos.

Se me cierran los ojos, pierdo altura, las musas se van. La inspiración me hace un quiebro. No sé si ha sido un sueño. Bueno mañana será otro día. Chequeo el whatsapp. Te quiero.

Ah!, ya me acuerdo de la peli... Pequeñas mentiras sin importancia.




jueves, 5 de septiembre de 2013

Acción Poética

Si a partir de hoy hago veinte poemas
me agarro a tu libro olvidado
y susurro que fueron mis penas
las que te dejaron sin verano

Si consigo rimar como pocos
me acostumbraré a tu agua de río
a tu viento pegando en mi cara
cuando aceche el invierno y el frio

Si mis manos soñaran palabras
te juro que me quedo a tu lado
aunque no haya papel de febrero
todavía, en nuestras manos

Ángel González, Gustavo Adolfo Bécquer
Rafael Alberti, Antonio Machado

Mi nombre entre tus paredes
Mario Benedetti, Benjamín Prado

lunes, 2 de septiembre de 2013

Cosas que no deberiamos olvidar




Para volver hay que irse primero
para entender al que se sienta a tu lado
hay que ponerse en su lugar

Para que te crean hay que compartir
para que no te olviden
hay que dejar huella

Para escribir hay que haber leído antes
para crear tienes que abrir los ojos

Para huir
necesitas un motivo

Para confiar hace falta un secreto
para hacer el amor hace falta follar

Para querer no hace falta ser de nadie
para sentir es mejor hacerlo a tientas

Para ganar hay que saber perder trenes
para disparar hay que apuntar desde abajo

Para soñar hay que fracasar dos veces
para viajar saber regresar a tiempo

Para enseñar necesitas un par de lecciones
para aprender hay que saber encajar otro golpe

Para llorar no hay que doblar esa esquina
para reir es mejor con un amigo

Para equivocarnos siempre nos queda mañana


Para que esto se acabe
no me esperes ahí sentado





Para vivir hace falta más poesía

 y faltas tú


martes, 6 de agosto de 2013

Menos de un 36

No sé como empezar esto.

Me dices que te gusta mi forma, mi manera
de encarar un papel en blanco, de soltar palabras
y hacer que se enciendan las luces de tu vida
cuando el negro de los suspensos y los amores pasajeros
te cubre las esperanzas.

Me dices también, que te gusta cuando invento.
Cuando llueve en mis poemas y en tu ciudad quema el sol de verano,
cuando mis dedos imaginan una puesta de sol y en las orillas
del Guadiana el viento se lleva las hojas,
cuando letra a letra paseo de tu mano por un Londres nevado
o cuando el silencio tiñe las postales y yo te meto
en una canción de Sabina.

Me dices también, que no sabes nadar
pero ya sabes que hemos cruzado a nado
todos los mares abiertos
aunque sólo sea cerrando los ojos.

Te decía que no sé como empezar esto, sin que la torpeza
me pueda, sin que las balas me atraviesen y me quemen la piel.

Sin echar de menos tú acento
o los besos que se pierden en las estaciones
y que yo meto en tus bolsillos antes de darme la vuelta.

Te prometo que he intentando que la magia
parase nuestros relojes
para que este café de primera hora de la mañana no sepa
tanto a nostalgia
para que estos pies no echen de menos otros pies
para que la alarma que nos pone en el mundo
no sea sólo una mera canción.

Y aunque el tiempo es inabarcable
y a veces maldito
y los lobos cuando salga la luna
intentarán abordarte

piensa en nuestro mundo de ciudades conquistadas
en el fuego de un poema
en las dos butacas del cine que nos espera esta noche
o en la pulsera de cuero que se coló en tu buzón

No sé como empezar esto
porque no quiero
que acabe

nunca


jueves, 25 de julio de 2013

Versos para tu magia ( I )

Me dijiste ayer que escribiera
y yo no guardo rencor
a la brisa marinera
que te abre el corazón

Me dijiste ayer que escribiera
y hace tiempo que no soy yo
desde que vi tus caderas
atravesar mi canción

Aquella noche traviesa
de lunas llenas, amor
descongelando poemas
que empapan la habitación

                -

Y en la Bahía de Cádiz
ese rojo atardecer
que humedece nuestros ojos
que hace que arda el papel

Dirán que somos dos locos
buscando aire en el mar
frenando cuando ellos corren
lanzados cuando hay que andar

             -

Vamos a matar los días
para volvernos a ver
para llenar de poesía
cada curva de tu piel

Vamos a quemar las noches
a reducir los kilómetros
a inventarnos otro idioma
que sólo entendamos nosotros



miércoles, 10 de julio de 2013

Donde vuelan nuestras cometas


Recuerdo aquel Mayo caliente de relojes parados y chicas en ropa interior. Recuerdo aquel comienzo de Primavera gritando a Borges en El Retiro, disimulando el vacío de tu piel, arrugando las hojas de los árboles, llenando viernes con Rock de pega.
Recuerdo aquella columna de Elvira Lindo en El País y aquel taller de poesía donde nos recitamos, verso a verso, como si fueran disparos de balas plateadas.
Recuerdo los ojos, las miradas, Madrid tan caliente y visceral como después de la Guerra entre tú y mis ganas, entre yo y tus piernas.
Recuerdo el sabor amargo a tierra pisada, a lo que sabes que nunca vuelve.
Recuerdo aquel concierto de Sabina, en Las Ventas, donde no estabas pero sí, en cada una de las canciones que brotaban de su voz rota.
Recuerdo las noches que no bebimos pero también las que bebimos demasiado, las playas que no existieron y las que marcamos en el mapa para volver a pisar.
Recuerdo las estaciones de tren, aquel viaje a París sin maleta ni corazón, las llaves de esa casa sin puertas ni teléfonos en llamas.
Recuerdo lluvia sin paraguas, nieve entre tus manos y las mías.
Recuerdo un tocadiscos sonando a tumba abierta y una Hispano Olivetti esperando a un escritor que nunca llegará a la cita.
Recuerdo tu Mac encendido sin prisa, esperando palabras que pasan de moda.
Recuerdo cuando tu escribías y yo era verano, cuando tú reías y yo era más verano todavía.

Ahora que recuerdo mucho y poco estoy pisando el suelo donde quema
y tú
sigues curando heridos leves, poniendo celofán a los carteles con mi nombre
allí donde vuelan nuestras cometas

lunes, 24 de junio de 2013

Desarme emocional

Te ví llegar como un rayo de luna llena
con Vista Cansada bajo el brazo
disimulando la guerra que hay en tus ojos

El sexo alquilado de mis días de ausencia
en que creía no conocerte
quedó sepultado por tu acento marcado
y tu risa contagiosa

Una postal que huele a Ibiza
duerme sin renunciar a tu mirada
debajo de los apuntes que trabajan tu futuro
y una pulsera desilachada se pelea con tu piel
para no perderse en el olvido

Cuantas emes se colaron sin querer
en mis guiones
antes de que la tuya entrara de puntillas
a cambiarme los márgenes y los puntos suspensivos

Creas en cada paso tu biografía
y te enredas entre mis letras
que te hacen inmortal, para siempre

No olvido que la vida
es lo que renuncias
pero también lo que se queda en las orillas
o en los finales de los poemas de Lorca
o en las avenidas que me llevan a tu cama

No olvido que somos los que se van
pero también lo que vivimos

que soy lo que han escrito otros
pero también lo que escribo

martes, 11 de junio de 2013

Californication

El invierno siempre apaga algunas luces, y Los Ángeles queda demasiado lejos aún, para imaginar una puesta de sol en tus piernas, para ser Hank y tu Karen, para que mis libros aparezcan en las librerías de toda la ciudad y sean traducidos a siete idiomas diferentes. Uno de ellos el tuyo, que traduzco a ciegas y con cierto miedo a no hacerlo bien.

Ya sabes que yo soy más de Nueva York y sus calles numeradas, de su frío que te cala y de la nieve en las aceras. Que imagino la vuelta a casa en el West Village, haciendo eses, después de una noche de besos y vino peleón. Que imagino alguna noche recogiendote a la salida de tus clases en la Universidad de Columbia y que lo hacemos en los baños del italiano ese, donde siempre suena Laura Paussini. Que salimos a correr los domingos por la mañana por Central Park y siempre te paras enfrente del edificio Dakota, como si el espíritu de Lennon aún siguiera allí, tocando Watching the wheels. Imagino.

Pero sé que tú pierdes la cabeza por pasar de noche con la ventanilla bajada y el aire pegándote en la cara por Mulholland Drive. Que te mueres por un helado, un te quiero y un beso dulce y salvaje mientras nos revolcamos en Venice Beach y suena en las radios algo de Nirvana.

Ya sé que no somos exactamente "eso" que dice la gente que hay que ser. Que en tu corazón hay restos de otros corazones y que guardas alguna herida debajo de esa piel que algunos llamaron tiempo. No te preocupes, yo no vengo aquí para salvarte, ni para borrar de un plumazo tu pasado.

Pero si quieres podemos volar de lado a lado de la cama. Sin paracaídas.

Piénsalo.

viernes, 31 de mayo de 2013

Era Ella

Nos encontramos en una casualidad
aunque yo ya te había visto en mis películas favoritas
incluso te había imaginado
y había recorrido cada centímetro de tu pequeño cuerpo
en ocasiones con pausa y ternura
en otras con violencia y revolución

Te reconocí al instante
tu pelo, tus ojos, tu culo
tus piernas tostadas por el sol de Agosto

Eras como un poema recién nacido
de mis manos
y desprendías ese olor a caramelo
que empalmaba
a los obreros de tu barrio

Cada domingo había abierto mi cuaderno
para dibujarte con palabras
y ahora te tenía allí delante, sin previo aviso,
con el deseo quemando
para mi depósito lleno

No eras tan frágil como en los sueños
es verdad
tu mirada me comió en el primer cruce
saltándose el semáforo, a 120 y me pillo sin cinturón

Yo que había paseado de tu mano
por París
que había leído a Machado en tus caderas
antes de hacer un 69 interminable
y que había caído rendido a los encantos de tus pies

Ahora, paralizado
se me desabrochó el corazón

aunque por aquel momento
ya volaba a varios metros del suelo


jueves, 23 de mayo de 2013

No busques más

No busques más puntos suspensivos
ni más bocas de alquiler
No busques guerras perdidas
ni camas vacías
ni aviones que crucen el mundo

No busques parar relojes
ni atrapar el futuro
ni lunas llenas que escondan mentiras
ni vino francés
en perfiles equivocados

Quédate aquí, conmigo,
cerca del fuego que llega desde la chimenea
Vamos a follar a pelo toda la poesía
que nos invada el invierno
aunque perdamos después el amor



de tanto hacerlo.

miércoles, 15 de mayo de 2013

Poesía contra la distancia

Tengo los kilómetros que nos separan,
tatuados en la piel
amortiguando cada caída, haciendo cosquillas al corazón,
desafiando a cuchillo un quedateconmigo al revés

Y echarte de menos aparece
en el primer café de la mañana, en cualquier libro que desempolvo
o en las paradas de metro que me ven llegar vacío de emociones

El olor de tu pelo se mezcla con el gentío
que atraviesa la Gran Vía
y la cerveza que bebo caduca
antes de llegar a mi garganta

El Camel que olvidaste en mi coche aún conserva
la marca de tus labios, esos labios que obviaron el precipicio
y quisieron juntarse con los míos

Y es que peor que Madrid no tenga vistas al mar,
es que no tenga vistas a tu habitación mientras duermes,
a tú clase de la facultad mientras lees a escondidas
12 cuentos peregrinos de García Márquez,
al atardecer de tu mirada cada segundo de magia

Yo sólo soy un verso suelto, un eslabón perdido
un James Dean sin patria ni bandera
y en mis venas hay un Madrid Barça cada minuto

Tú, en cambio, eres una Nochevieja constante
un sábado en lunes, la mejor medicina
y cada milímetro de tu cuerpo es un poema de Borges,
una emoción desmedida



Últimamente
Felicidad
sólo
rima


contigo.

lunes, 29 de abril de 2013

Lo que importa

Sé a ciencia cierta que
los atardeceres vacíos son los que más pesan
que las minorías pueden promover revoluciones
y que no siempre hay nubes
en el azul del cielo

Sé, muy bien,
que hay Guerras que son Paz entre dos estrellas
que hay amores frios
y traiciones que queman

También sé, que no hay Buenos Aires sin tango
ni Madrid sin ti
que no hay gol sin miedo
ni abrazos sin alma

Que hay inviernos de Magia
y veranos de yanoquieroestarcontigo
que el silencio es necesario
y que el ruido es relativo

Sé, si me permites,
que la poesía recorre las calles
que los pájaros están mojados
y hay un asesino a sueldo en cada esquina

Que lo que importa tiene dos caminos
que Roma es tú ciudad favorita
y que en los parques de tu barrio
hay palabras que escribimos juntos
en un libro que no existe para los demás

Sé, después de todo,
que la nostalgia es robarle al pasado un porqué
que temblar es creer sin pensar
y que los 9 de Agosto
vuelven los nudos en la garganta
se cierran las Avenidas
el Calderón se levanta
y se abren los corazones que creen en lo que decías





domingo, 21 de abril de 2013

Estaciones

Soy la primavera
que te espera
en la sala de urgencias

El verano apagando
el amor
que encendiste en mi cama

El Otoño llamando
a tu puerta
que llora un desahucio

El invierno
que asume derrotas
que inventa te quieros
y rima contigo

miércoles, 17 de abril de 2013

Cuando estamos juntos

Cuando estamos juntos cualquier poema se entromete
      en los abrazos
se junta la noche con el día
   y cada habitación que nos acoge es un París desarropado


Cuando estamos juntos se queman las postales del invierno
   perdemos cada taxi enumerado
 y andar es pasear en un velero
                que muere en cada esquina que doblamos


Cualquier parque, cualquier puente, cualquier farola encendida
es buen lugar para desarmarnos
para buscar nuestras balas perdidas
nuestras miradas que abren telediarios


Da igual si suena Andrés Suárez, Pereza o Sabina
siempre acabamos colándonos
                      en todas las canciones
                                    que suenan entre tu boca y la mía


¿ Y los amaneceres ?
parecen Nueva York en carnavales
melodías de piano a contraluz
desayunos de saliva compartida


Y ya sé que la magia nunca se va
y que las cuatro estaciones pasan como diapositivas
                      en tus ojos
como tinta en un papel de periódico, como olas en la mar


    Y el pasado es más pasado todavía
y el presente se nos muere entre las manos
porque sólo es el futuro el que sabe nuestras cartas
el que nos hace cosquillas
         el que nos quita la ropa cuando suena una guitarra


Cuando estamos juntos vuelven los atardeceres
              despiertan las bibliotecas
      cierran todas las iglesias
   se acaba el hambre en el mundo
                         y no duelen las banderas


Cuando estamos juntos tus Vans muerden mis preguntas
       hay un quiero en cada puedo
y las despedidas no terminan en adioses
 sino en versos escondidos de García Montero



Cuando estamos juntos todo lo demás importa un poco menos
                 
                       porque improvisar también es vivir
             y vivir es seguir soñando


* para ti soñadora



jueves, 4 de abril de 2013

Crisis Creativa

Hablemos de un vuelo a tus labios
de camas que escondan
más de un corazón

Hablemos de tus borracheras
de mis despedidas
en una canción

Hablemos de un barco pirata
de tus otros chicos
de mi doble yo

Hablemos de lo que queremos
de lo que nos quita
y nos da la razón

Hablemos de amores que matan
hablemos de sexo, droga
y rock & roll

Hablemos de cambios de tiempo
de nieve y cadenas
de un anticiclón

Hablemos de fueras de juego
de andar con cuidado
de meterla un gol

Hablemos de escribir a tientas
de entrar en tus piernas
de fuego y calor

jueves, 21 de marzo de 2013

Atardecer en la facultad

Una mariposa revoletea
detrás de tu avión en llamas

El ruido del tráfico se mezcla
con los gritos de los estudiantes
que abarrotan la Avenida Complutense

Huele a exámenes de Mayo
a suspensos y aprobados
a apuntes con letra rápida

La tristeza y la alegría chocan
como dos trenes en un raíl
y suenan a despedida las frases
que nunca dices

Un chaval toca Desolation Row
a el otro lado de la calle,
parece que allí no es presente
parece que otra época se ha adueñado
del caminar y de las farolas

Tus amigos fuman hierba
mientras los últimos rayos de sol
calientan tus ojos color miel
y la libertad, que siempre fue tu amante pasajera,
cabe en un mini de cerveza

Los pitillos han dejado paso
a un ejército de piernas
que los chicos persiguen,
algunos con picardia otros con torpeza

Tu corazón está lleno de revoluciones
y de amores detrás de los escenarios
y de canciones que creías tan tuyas
pero son de todas las demás

Y mientras los semáforos en ámbar
reducen lo prohibido
el mar se acerca a tu pelo desordenado
con el día derrotado, con los barcos en la orilla

Y las primeras Guerras del verano
se intuyen por la mirilla
y en fila de a uno todos mis versos
despliegan su artillería




viernes, 15 de marzo de 2013

Y sin embargo

Te subiste a aquel columpio del parque
como cuando te dejaron por primera vez.
Estaba lloviendo,
y en cada impulso había un pulso
entre pasado y futuro, entre rencor y perdón
entre recuerdo y olvido

Tu ciudad era tan sólo un decorado
porque como bien sabes
esto ya lo has vivido alguna vez
sólo cambia lo que te rodea y quizá los personajes,
menos el protagonista,
pero el guión es el mismo

La lluvia parece que cesa
como cesa tu balanceo
pero no el palpitar eléctrico
de tú corazón salvaje

Entonces decides volver a casa
con el rimel corrido y la canción más triste
sonando en tus auriculares

Coges el último metro
que asocia principio y fin
vagón solitario, mirada perdida
próxima estación: Aluche

Llegas a casa con la madrugada pisándote
los tacones

La casa está sola, deshabitada.

Preparas café para dos pero te das cuenta
que dos no es igual que uno más uno,
que ya no te espera su cuerpo debajo del edredón,
que ya no habrá más polvos guarros
con los ojos cargados de alcohol

Y no puedes evitar imaginarle.
Imaginarle desabrochando otros botones
besando otras bocas
entrando en otros cuerpos
derramando la tinta de sus tatuajes
en las sonrisas menos sinceras

Decides romper con la rutina
de tristeza absoluta
o al menos cambiarla por un sueño
que dure más que una eternidad
y te desnudas sin alma, mecánicamente

Sólo un tanga de hilo
te aguanta esta noche
y entras en la cama, fría, como cuando se marchaba
los lunes por la mañana

Y vuelves a mirar el teléfono
por si acaso, ya sabes,
pero no hay mensaje ni llamada

De súbito
vuelve el ruido de lluvia
y la sensación térmica baja
aunque sólo sea emocionalmente
y notas un escalofrío que recorre la espina dorsal
hacia abajo, que hace que te acurruces y enredes los pies
para notar un poco de verano ahí en tu sur

Y todo y nada se mezclan en tu cabeza
y el sueño quiere pero no consigue llegar
y buscas algún verso
que se dejara debajo de la almohada
pero no encuentras te odio
ni te quiero, encuentras un sin embargo
como decía Sabina


jueves, 7 de marzo de 2013

(SIN) Esperanza

Leo en los diarios que hay ya más de 5.000.000 de corazones rotos en la cola de eso que llaman Paro y que yo llamo sin esperanza. Porque dicen que eso es lo último que se pierde, pero la muy puta ( la esperanza digo ) siempre les da la espalda y se mete en el bolsillo de los que tienen poder para comprar justicia, de los que comparten mantel con el Rey o de los que van de liberales y honestos pero ponen la mano para coger dinero manchado de sangre.

Pero yo hablo de Manuel, de Sara, de Silvia, de Andrés, de Pedro, de Ali, de Anita ( que hacía un pan de otro mundo ), de Julito " el ciego ", de el  Laudrup de Puerta Bonita, de Quique que tocaba en Rio Rosas cuatro acordes rotos que marcaban la línea de tus ojos con el cielo.

Hablo de Julia y Marcelo. Julia, administrativa en una multinacional, víctima de un ERE. Un cambio de vida, un viaje a el Norte de Londres, un trabajo a media jornada en el Zara y .... la distancia. El buscar su cuerpo a el otro lado de la cama, su olor, su sexo...y encontrar el miedo como único comparñero de viaje. ¿ Y Marcelo ? trabaja como vigilante jurado en unos grandes almacenes dos días por semana. Cuando llega a casa ( la de sus padres claro) suda, tiembla, llora, se coloca y baila con la depresión uno de esos bien pegados.

Hablo de Emilio. Madridista a muerte. Socio ( y de la soledad también). Me ponía los botellines aquellos domingos raros donde Fernando Redondo iluminaba el teatro con un pase al hueco mirando a Corrientes. Ahora sin Bar, con dos hijos adolescentes y sin Lola a la que abrazar con morbo cada noche. Se marchita en el prostíbulo del barrio tomando Dyc con Coca Cola y esnifando polvo blanco con melancolía a gramos iguales.

Hablo de Lupe, que a duras penas puede pagar ya la hipoteca, licenciada en olvidos y matriculada cada verano en amores breves que se desinflan por la aguja del tiempo. Perdió su puesto en una oficina de correos al mismo tiempo que perdía a su madre de cáncer en un Hospital Público ( sin mantas, sin una misera botella de agua ) mientras los que metían la tijera en los más básico cenaban a 100 euros el cubierto.

Y no me quiero olvidar de Javi, Heras, Jorge y Sandro. Estudiaron juntos ADE y su pasión por la música les llevó a formar una banda. Ahora sin futuro y sin poder salir a tocar montan escenarios sin contrato y en condiciones precarias. Pero como dicen ellos; las canciones no salen por contrato, salen por la piel.

Y te contaré algo, yo también era de los que decían como tú.; que ya somos muchos como para que vengan más. Que el barco ya está demasiado lleno. También decía como tú que joder con los sudamericanos ( sudacas, en fin...) cuando íbamos a jugar un partidito a los campos del parque y nos encontrábamos sin sitio. Hasta que conocí a Antonio claro, un ecuatoriano que se tiene que volver a su país después de 12 años en España porque no puede ni pagar un cuchitril de habitación en Lavapies, con una hija de tres años aquí y dos adolescentes que ya casi ni le recuerdan allá. Vino buscando esperanza, pero esperanza ya saben donde está.

Pero, a pesar de los millones en Suiza, las colas del Inem, los yanocontamoscontigo, las noches sin dormir, los miedos, los excesos, los teechodemenos, las puertas cerradas, los sobres sospechosos, las lágrimas contenidas y derramadas mirandote al espejo, los Presidentes de la desesperación...a pesar de todo eso, aún quedan esquinas que doblar, aún quedan amigos con los que brindar, y cruces de miradas, y canciones que nos van a romper, y goles que nos van a levantar. Aún quedan besos de buenasnoches, y abrazos en aeropuertos, y versos de García Montero bajando por tu tripa, aún queda Casablanca un domingo lluvioso por la tarde, y playas para pies descalzos, y tinta resbalando por mi piel, y ciudades que se abran a tus ojos y se cierren a los míos. Aún quedan notevayasquedateadormir, y violencia en nuestros besos, y repasos en los bares y todo lo que tú quieras. Porque nos podrán robar otras cosas, pero no nuestros principios, no la libertad, no nuestro derecho a soñar.







lunes, 25 de febrero de 2013

Temblar

Nunca un segundo se hizo tan eterno
y es posible que las estaciones de metro que separan
tus labios de mis labios
sean veranos de lluvia
lluvia que no moja, pero duele.

Los románticos se empeñan
en desabrocharte con canciones
y cualquiera es más que yo a las seis de la mañana

Y en los abismos
donde crecen los oceanos de dudas
donde un disco es un pequeño milagro
donde no se controlan las letras que resbalan por el folio
allí












estoy yo

martes, 22 de enero de 2013

Eme

No la conocía. O al menos yo no sabía que la conocía. Pero allí estaba, con sus ojos grandes y eléctricos, disparando fuegos artificiales en cada parpadeo, con su media sonrisa sincera que cambiaba el color de las cosas. Incluso en aquel lugar que no era el mejor para abrazar a la vida, aquel lugar que separaba lo imposible de lo más humano, de lo que duele al respirar.

Compartimos un par de latas de cerveza, y era como si el tiempo hubiera querido despertarnos a nosotros y paralizar lo demás. Ella estaba llena de libertad y ganas de saltar precipicios. Me confesó que aún fumaba a escondidas y que después de verano empezaría a estudiar en la facultad de los sueños. Su acento al hablar arrastraba ciudades y no había más democracia que su forma de andar.

En su pelo largo, que caía sobre sus hombros como nieve en la hierba, se enredaban canciones de Pereza y desfiles de príncipes azules, y en sus piernas, que eran autopistas de peaje, rimaban la ternura y el deseo.

Era la Rock Star de su pandilla, la estrella que brillaba en los bares, la que levantaba del pupitre a los chicos de clase, pero también la que leía debajo del edredón y tocaba la guitarra bajito una noche cualquiera, mientras la luna perdía los papeles y las sirenas de las ambulancias sonaban de fondo en algún lugar de la ciudad.

Se desencadenaron las conversaciones y sus manos relataban botellones y fiestas, carnavales de alcohol, playas vacias de arena fina y olas que duelen. Las mías hablaban de noches pintadas, de atardeceres en Brighton y Rock & Roll de verdad.

Fue fugaz como un disparo, pero fue suficiente para salvar un verano que se perdía entre aeropuertos y libros usados. Prometimos volver a vernos, y se separaron nuestros caminos con la misma facilidad con la que se juntaron. La vi alejarse, la chica con nombre de canción, desde mis Ray Ban aviador. Luego el sol se fue apagando lentamente, otro día más, como se apagan las luces cuando se acaba el baile en la fiesta de final de curso. No la he vuelto a ver.

Madrid, un poco jaula a veces, espera con ansia a que pase el invierno, a que se derrita la escarcha y vuelva el olor a rosas en el Parque del Oeste. A que se publique el nuevo disco de Quique González y las chicas salgan a pasear con camisetas de tirantes por las calles. A que se abran las terrazas y pegue el sol en la cara mientras brindo con los buenos amigos en la Plaza de Tirso de Molina. A las noches sabineras y a las de veneno compartido. A que Eme se deje caer por aquí, otra vez...