Mi país se arrastra por mares de barro
la indignación se nota en el ambiente
no hay bandera que tape tanto escándalo
se puede ver el fuego entre los ojos de la gente
España se desangra en cada telediario
dicen que está sentenciada a muerte
yo intento pensar que todo esto pasará rápido
porque la esperanza es lo último que se pierde
La tierra de Rafael Alberti, de Lorca, de Machado,
la que se moja e inunda las calles
se que algún día volverá a salir el sol por los tejados
La tierra de la Alhambra, de Cádiz, de mi barrio
donde cada persona cambia cosas para que todo cambie
para que tu futuro no se rompa en mil pedazos
viernes, 27 de abril de 2018
martes, 3 de abril de 2018
Marzo en Edimburgo
Hay un susurro melancólico en la calles
en la primavera que recién ha pronunciado tu nombre,
llueve en los corazones de los poetas
que nunca tuvieron un beso al que llamar hogar
En el puente que separa lo real de lo mágico
aún sopla con fuerza el viento que viene del puerto
un viento tan helado que se llevó las palabras
de un cuaderno de bitácora
que ahora se ahoga en los mares del norte
Los héroes descansan en cementerios, que inundan la ciudad
de olvido y derrota,
a lo mejor, la melodía de una gaita salve un día
que se desangra en los adoquines
y recuerdo a todos aquellos que alguna vez se fueron
y no pudieron volver
Soy un afortunado, me repito,
mientras bebo cerveza y escucho música en Victoria Street
y los detalles adquieren la importancia necesaria
para que sea de verdad el momento
Por las noches, la serenidad se mezcla con la luz tenue de las farolas
y una felicidad fugaz te da calambre,
te abrazas al presente,
sin dejar que te afecte esa especie de nostalgia que lo envuelve todo
y es cuando te das cuenta que has dejado de ser un figurante en la ciudad
para pasar a convertirte en parte de ella
Quizá el fracaso forme parte del relato
quizá le de sentido a nuestra historia
quizá el miedo solo sirva para privarte de poder joderla
de quedarte sentado mirando la ventana viendo pasar la vida
Llevo todo el día vagando por las calles
sin rumbo
con ese verso de Dylan que me emocionó anoche
"Behind every beautiful thing there's been some kind of pain"
en la primavera que recién ha pronunciado tu nombre,
llueve en los corazones de los poetas
que nunca tuvieron un beso al que llamar hogar
En el puente que separa lo real de lo mágico
aún sopla con fuerza el viento que viene del puerto
un viento tan helado que se llevó las palabras
de un cuaderno de bitácora
que ahora se ahoga en los mares del norte
Los héroes descansan en cementerios, que inundan la ciudad
de olvido y derrota,
a lo mejor, la melodía de una gaita salve un día
que se desangra en los adoquines
y recuerdo a todos aquellos que alguna vez se fueron
y no pudieron volver
Soy un afortunado, me repito,
mientras bebo cerveza y escucho música en Victoria Street
y los detalles adquieren la importancia necesaria
para que sea de verdad el momento
Por las noches, la serenidad se mezcla con la luz tenue de las farolas
y una felicidad fugaz te da calambre,
te abrazas al presente,
sin dejar que te afecte esa especie de nostalgia que lo envuelve todo
y es cuando te das cuenta que has dejado de ser un figurante en la ciudad
para pasar a convertirte en parte de ella
Quizá el fracaso forme parte del relato
quizá le de sentido a nuestra historia
quizá el miedo solo sirva para privarte de poder joderla
de quedarte sentado mirando la ventana viendo pasar la vida
Llevo todo el día vagando por las calles
sin rumbo
con ese verso de Dylan que me emocionó anoche
"Behind every beautiful thing there's been some kind of pain"
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