El lunes llenaste de vida las calles con tu vestido de lunares
el martes apagaste las luces del parque para ver las estrellas
el miércoles dormiste desnuda en un mundo sin balas pero con besos
el jueves saltaste al vacío y viste pasar la felicidad mucho más veloz
el viernes desataste la tormenta en los bares de Malasaña
el sábado marcaste con tus labios más de una copa de vino y más de un semáforo en rojo
y el domingo,
viniste a verme con tú sonrisa de medio lado
y la semana esperando había merecido la pena